Los Smartphones han revolucionado la manera de tomar fotos: con rapidez, de forma espontánea, y sobre la marcha. Los preparativos previos ya no son necesarios, pero siguiendo estas sencillas instrucciones, tus fotos de amateur se verán diez veces mejor.
1. Comprueba la configuración de tu cámara
Todos los smartphones de hoy pueden tomar fotografías en diferentes resoluciones, por lo que puedes cambiar el tamaño del archivo (para enviar una foto a través de un MMS o correo electrónico, por ejemplo). Asegúrate de tomar las fotos en la más alta calidad disponible, para reducir al mínimo las limitaciones de la cámara de tu teléfono.
2. Sostén el teléfono como una cámara
Una de las razones por las que las cámaras profesionales dan esas imágenes hermosas es su peso, que sirve como estabilizador. Dado que los teléfonos inteligentes son cada vez más y más livianos, es importante compensar esta falta de estabilidad “anclando” tu teléfono correctamente – sostén el teléfono inteligente lo más cerca posible a tu cuerpo, en lugar de con los brazos extendidos (después de todo, estás tomando fotos, no bailando tango).
3. Utiliza el temporizador para evitar las fotografías borrosas
Debido a que no todos los teléfonos inteligentes fueron diseñados para ser amigables para los fotógrafos (¡después de todo es un teléfono!), el acto de tomar una fotografía puede ser un poco difícil. De no ser que seas uno de los pocos afortunados que tienen un botón dedicado a la obturación, la ergonomía del diseño de los teléfonos todavía no llega tan lejos. Así que, en lugar de hacer yoga con los dedos, trata de usar la función de temporizador. De esta manera, puedes presionar el disparador y luego tendrás tiempo para sostener el teléfono correctamente.
4. Haz zoom con tus piernas
Dado que las lentes de un teléfono inteligente son muy pequeñas, es difícil encontrar un teléfono con cámara con buenas capacidades de zoom (al menos por el momento). En lugar de confiar en el zoom limitado de la cámara, trata de acercarte al objeto.
5. Utiliza las mejores aplicaciones disponibles
La mayoría de los teléfonos inteligentes que se pueden comprar en estos momentos tienen una aplicación de fotos buena pero no excelente. Hay alternativas mucho mejores para los iPhones y Androids. Las aplicaciones como Instagram, Hipstamatic o 360Camera son las más comunes, pero se pueden encontrar alternativas para tipos específicos de fotografía (como HDR, Panorámicas o fotografía macro).
6. Crea un acceso directo para un inicio rápido
En la fotografía (sobre todo en un teléfono inteligente) lo más importante es el tiempo. Puesto que ahora tienes una cámara contigo en todo momento, asegúrate de que estás preparado y listo para usarla en cualquier momento.
7. Difunde tu Flash
El flash de la cámara del smartphone es muy fuerte (para compensar su pequeño tamaño). Esto es algo que afecta a cada cámara que viene con una tarjeta de la luz (como el flash pop-up en tu DSLR). La solución es simple, eficaz, y MacGyver estaría orgulloso: sólo hay que poner un pequeño trozo de cinta adhesiva transparente sobre el flash de la cámara. La cinta adhesiva actuará como difusor, haciendo que la luz cubra una mayor área y evitando ese aspecto de ciervo-sorprendido-por-faros que tienen las fotos sacadas con flash normal.
8. Utiliza el flash Incluso durante el día
Esto puede sonarte extraño, pero en realidad es uno de los tips más útiles en la fotografía. Mediante el uso del flash de tu cámara durante el día, puedes manejar las condiciones difíciles, como cuando se dispara hacia el sol o cuando el modelo tiene sombra bajo sus ojos).
9. Prueba diferentes posiciones
Dejando las bromas sobre el Kamasutra a un lado, lo bueno de tener una pequeña cámara en el bolsillo es el hecho de que puedes tomar una imagen en algunos ángulos muy interesantes, algo que en realidad no se puede hacer con una cámara de tamaño completo. Trata de probar de tomar fotos desde el suelo, o poner el teléfono dentro de otros objetos para obtener diferentes puntos de vista.
10. Dispara, ¡no hables!
Hay una regla acerca de la fotografía que dice que “la mejor imagen es la que se toma”, lo que significa que en realidad no importa qué tipo de cámara o lente estás usando, lo importante es que tengas tu cámara contigo. Lo mejor de la fotografía digital es que después de recibir una cámara, ¡la toma de fotografías es gratis! No hay costos de revelado / procesamiento, por lo que si piensas que tienes una buena foto en potencia, toma 10 fotos de la escena, tratando diferentes ángulos. Y cuando es el momento para seleccionar la foto ganadora (y eliminar las malas), hazlo en tu computadora, porque la pantalla es tan pequeña en el teléfono, que puedes pasar por alto algunos buenos detalles, algo que se ve realmente bien una vez que lo vemos en tamaño completo 🙂